¿SÍ O NO?, COMER CARBOHIDRATOS EN LA NOCHE


Esta creencia viene desde tiempos remotos, donde la lógica es dormir = reposo = todo lo que coma se almacena en forma de grasa: MITO

Las investigaciones han demostrado que nuestro metabolismo promedio disminuye solo un 15% cuando estamos dormidos y esto se debe a que la mayor parte de la energía que usa nuestro cuerpo durante el día es para procesos celulares que nos mantienen vivos, sin embargo, investigaciones han demostrado que en la fase REM del sueño, el gasto metabólico aumenta, es decir, hay una utilización de energía mayor.

Otro mito es que nuestro cuerpo utiliza inmediatamente después de comer todos esos alimentos en la actividad física, pero en el caso de muchas actividades como el entrenamiento de fuerza, nuestro cuerpo sigue requiriendo de calorías para la construcción del músculo, y esto se da sobre todo en la noche mientras dormimos.

La lógica que se tenía era algo así como pensar que nuestro cuerpo tiene un horario controlado para controlar la hora para saber si transformar el carbohidrato en grasa dependiendo si es muy tarde o no. PERO NO ES ASÍ, el aumento o pérdida de peso (sobre todo de masa grasa) es el número de calorías que se consumen al final del día más el equilibrio de nutrientes.

Así que muchos mitos rondan alrededor de los carbohidratos que nos hacen más bien (que mal) siempre y cuando sepamos elegirlos correctamente para que nos aporten su energía como los complejos (verduras, avena, granola y legumbres) que cuentan con un valor nutricional más alto al contener fibra, vitaminas y minerales, contra los simples (azúcares, dulces, pastelería, frutas y sus jugos) que contienen refinados y muy pocas vitaminas y minerales.